Toluca, Estado de México
En el marco del Día de la Gastronomía sostenible declarada por la ONU, la Secretaría de Cultura y Turismo reconoce dentro de la amplia variedad de productos y platillos gastronómicos del Estado de México, la dedicación y esfuerzo por incluir procesos sustentables que apoyen el desarrollo de las comunidades y la cadena de valor que integra el proceso de elaboración de alimentos.
La gastronomía, además de ser el arte de preparar una buena comida, también hace referencia a un estilo de cocina de una determinada región. La sostenibilidad implica que la agricultura, pesca o incluso preparación de un platillo se realice sin desperdiciar recursos naturales ni perjudicar el medio ambiente o la salud.
Por lo tanto, la gastronomía sostenible es sinónimo de una cocina que tiene en cuenta el origen de los ingredientes, cómo se cultivan y cómo llegan a nuestros mercados y, finalmente, a nuestra mesa.
Es importante saber que la comida no es lo único que se desperdicia cuando no se consume, un sistema alimentario engloba todos los elementos: medio ambiente, personas, insumos, procesos, infraestructuras, gobiernos, instituciones, así como actividades relacionadas con la producción, la elaboración, la distribución, la preparación y el consumo de alimentos, los productos de estas actividades, incluidos los resultados socioeconómicos y ambientales.
En México, parte de las estrategias que han implementado algunos emprendedores es trabajar de la mano con familias o cooperativas que reciban un ingreso justo por su trabajo y su producto, rescatar ciertas especies de maíz y cultivarlas de manera natural, donde la tierra es trabajada libre de pesticidas, lo cual ayuda a generar una cosecha segura y limpia.
La cocina prehispánica también es promovida por el sector restaurantero, quienes nos invitan a consumir parte de la dieta de nuestros antepasados lo que incluye agregar insectos a nuestros platillos, ya que son una fuente de proteína con alto valor nutricional.
Otro punto importante es la pesca sustentable, que evita dañar y sobreexplotar los ecosistemas marinos, y que es trabajada en conjunto con pesquerías sustentables.
En el Estado de México existe variedad de alimentos que pueden ser cosechados dentro de nuestro territorio, además de que también fomentan el consumo local al visitar los mercados tradicionales de cada municipio.