Los libros son como semillas.
Pueden permanecer dormidos durante siglos,
y de repente florecer en el suelo más yermo.
Carl Sagan
Arturo Suárez Ramírez / @arturosuarez
Estimado lector, gracias. El muro que colocó la 4T en Palacio Nacional para frenar las manifestaciones de mujeres les dio resultado, no pintaron la fachada del inmueble, no se incendió la puerta Mariana, en la otra acera no pasó nada en la Catedral Metropolitana, pero no resolvieron nada de fondo, no hubo diálogo, no hay respuesta desde el ornato en que está convertida la Secretaría de Gobernación, por el contrario, el caudillo sigue pensando que es un movimiento patrocinado por sus adversarios.
Que conste que no quiero abanderarme con lo feminista, pero era indispensable que el gobierno de López Obrador y de Claudia Sheinbaum dieran las explicaciones pertinentes de varias anomalías que se presentaron durante el 8M. Tampoco es una defensa a ultranza de las que utilizaron la violencia y lastimaron mujeres miembros de la policía, pero algo debe quedar claro, los dos gobiernos tienen la responsabilidad mayor, simplemente porque son gobierno. Aquí no hay salida como la directora del Metro quien dijo “yo solamente soy la directora”.
Deben explicar por qué había policías vestidos de civil arrojando piedras, gas y hasta petardos escudados en la valla humana de efectivos femeninos de la Policía capitalina, ahí están los videos, los testimonios de los compañeros reporteros que lo documentaron, incluso la fotorreportera Sáshenka Gutiérrez fue agredida, detenida y esposada sin ningún protocolo. Claro a esto hicieron oídos sordos en el Gobierno Central, todo justificado, todo se iba a investigar, esas fueron las palabras de Alfonso Suárez del Real.
No hay duda de que el espacio aéreo del Palacio Nacional es una zona restringida por seguridad nacional, eso no es nuevo, pero llamó poderosamente la atención y dio tema para la especulación el personal que estaba en la azotea con artefactos, luego aseguraron que era para “inhivir” drones, así lo escribió Ramírez Cuevas en un tuit, pero si hubiera sido en la administración de Calderón o Peña, habría sido un escándalo de dimensiones mayúsculas, pues claro propiciado por el inquilino del Palacio.
Insisto, resolvieron lo de las pintas, pero no el problema de fondo, por el contrario, López le sigue echando leña al fuego, sigue azuzando desde la mañanera, denostando y atacando. Eso sí, antes de la marcha, López se reunió con un grupo de mujeres afín a su gobierno, incómodas tuvieron que vitorearlo “es un honor estar con Obrador” les pidieron que gritaran, luego la foto con el presidente más “humanista” que ha tenido el país.
El trabajo de las televisoras quedó cuestionado, no hicieron una cobertura como la del año pasado, como si hubieran recibido la orden de dar cuenta del hecho, pero nada más, sin editorializar, sin tomas cerradas que mostraran los enfrentamientos, eso sí en las cuentas de Twitter de los comunicadores estaban las imágenes y los mensajes que no se dieron en las transmisiones, benditas redes sociales.
Cierto no pasó a mayores, no hubo pérdida de vidas, de acuerdo a datos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la capital del país resultaron 62 policías y 19 civiles lesionadas, ninguna de gravedad, pero es una alerta para que el Pejelagarto le paré al odio, a la mentira y a la traición que dice son sus principios… pero mejor ahí la dejamos. No a la violencia.
Entre Palabras
¿La gasolina y el gas por las nubes? ¿Pues no que ya no había gasolinazos?
Escríbeme tus comentarios al correo suartu@gmail.com y sígueme en la cuenta de Instagram en @arturosuarez_.
Hasta la próxima.